Fabián Blanstein: El tiempo de un luchador

En su juventud empezó enseñando en las escuelitas de fútbol y hoy es el técnico de la primera división de Ferrocarril Roca. El domingo en Bahía Blanca lideró a un grupo de jugadores que alcanzó uno de los mayores logros de la historia del deporte florense.

Por Flavio Iacomini

Ni bien se recibió de Profesor de Educación Física en la Universidad Nacional de Olavarría Fabián Alejandro Blanstein se radicó definitivamente en Las Flores, su pueblo natal, para dedicarse a enseñar fútbol a los más pibes.

Facundo Maciel, Sergio Cenzano, Emanuel Tus, por citar solo tres nombres, estuvieron en diferentes etapas en ese proceso de formación liderado por el “Ruso”. El domingo en el estadio del Club Atlético Liniers de Bahía Blanca, la figura del profe que les explicaba lo del toque y rotación y demás menesteres de la redonda, era la misma, pero solo que veinte años después y en otros compromisos futbolísticos.

Tras aquella derrota electoral de 2015 en el mano a mano con el escribano y actual intendente Ramón Canosa, Fabián Blanstein se fue de la función pública y volvió por su pasión por el fútbol.

Casi tres años y medio después, un catorce de abril de 2019, a quinientos kilómetros de Las Flores, detrás de la línea de cal, envuelto en nervios y emoción esperó que Jossimar Mosquera pateara el último penal. Cuando la pelota enviada por el defensor colombiano infló la red, salió corriendo para abrazarse con sus jugadores y seguro pasaron mil cosas por su cabeza.

No es para menos, a cuarenta minutos del final, levantar un 0-2 con un jugador menos ante la expulsión de un jugador emblemático como Facundo Onraita para después terminar ganando el partido es cosa de grandes

“Este grupo de jugadores sabe lo que quiere y mucho han madurado. Ni bien llegamos el sábado a Bahía Blanca estábamos todos contagiados de optimismo. Se fortaleció la relación entre nosotros” le señaló esto a FM ALPHA el D.T ferroviario para luego agregar “No obstante, ganar este partido parecía una misión imposible. Liniers fue un rival que todo el tiempo nos atacó y esto habla de la grandeza de este plantel de Ferro que propuso siempre y que fue a buscar todo lo que luego encontró”.

La ciudad de Bahía Blanca con sus 450.000 habitantes entre tantas cosas refugia en sus extrañas a un club histórico y fuertemente posicionado fundado en 1908. El Club Atlético Liniers, con su emblemático estadio con capacidad para 7.000 espectadores en pleno centro de la ciudad y con su eterna rivalidad con Olimpo, fue el escenario.

El domingo allí, la primera división de Ferrocarril Roca se anotó un triunfo histórico. Cuando Facundo Maciel agarró la pelota para patear el penal cuando estaban 1-2 abajo, Fabián Blanstein pensó ¿Le pegará con los cordones? El goleador, abrió el pie y la puso bien abajo a la derecha del arquero Lucas Partal, con los cordones e inatajable. Veinte años antes, un luchador, se lo había enseñado. El pibe aprendió y dejó la mesa servida para que ahora se venga Ferro de Olavarría en la semifinal.. Todo lo demás, fue parte de la historia.