Oscar Urruchúa sobre el curandero Guerreño: “La vida se la debo a Dios, no a él”

Oscar Urruchúa, ex comisario y actual comunicador, habló en el programa “El Periodístico” conducido por Ernesto “chino” Varela sobre su salud, desestimando una estrecha relación con el curandero de Bolívar inclusive opinando del peor destino para un violador después que la justicia lo halló culpable sobre distintos abusos.

Luego de haber tenido un ACV que lo dejó ocho días en coma y sin posibilidades de vida, hoy, sobre su salud, expresó «estoy bien. Eso me ha enseñado a valorar más la vida, desde lo mínimo hasta lo máximo. Hoy por hoy tomó las cosas de otra manera. Lamentablemente a veces hay que pegarse estos golpes para darse cuenta que la vida es hermosa». «Tengo un tumor cerebral, que lo vengo tratando hace años. En un momento sucedió lo que los médicos preveían. La arteria se rompe y aparece este ACV hemorrágico. Pero me ayudo mucha gente y di con el médico exacto en la clínica Chacabuco de Tandil. Entre en coma y estuve ocho días allí. Los partes médicos no me daban posibilidad de vida, agregó para luego agradecer a toda la gente que no dejo sola a su familia y principalmente, a los florenses que hicieron una cadena de oración por él.

Por otro lado, comentó sobre su situación actual en la parte judicial, con respecto al caso de Raúl Guerreño lo que motivó el apartamiento de la fuerza… «Yo no sabía que Raúl era el «hermano Raúl». En su momento, hubo una familia que fue a verlo y que tenía una fe ciega en él, para pedirle por mí. Si bien acertó muchas cosas que fueron sucediendo, yo no le debo la vida a él. Después, mi situación, le sirvió para decir que salvó al comisario. Yo le agradecí por mantener a mi familia con esperanza pero la vida se la debo a Dios, no a él», explicó Oscar.

Además, remarcó «nunca fui a Bolívar a atenderme, sólo a agradecerle. Después fui a llevar a una amiga que quería conocerlo. No tenía ninguna relación con él, sólo por teléfono. Cuando pasa la denuncia, donde lo declaran culpable de una violación de una menor de Tandil, me involucran a mí porque la abogada saca ventaja, diciendo que ella tenía una estrategia conmigo y eso es mentira, yo no la conozco. El violador tiene que tener pena de muerte o cien años de cárcel. Un violador es un enfermo que no tiene cura».

«Estoy esperando que se haga justicia. Me están imputando por abuso de autoridad. Estuve sólo dos veces con él. Como hubo cruces de llamadas y él dice que tenía mucho contacto con efectivos policiales y políticos. Pero no conozco ni a la menor ni a la familia (…) fue un abuso. Cuando salió en Infobae yo no estaba involucrado. Cuando termine la causa y salga absuelto, tomaré las medidas necesarias. No sé si quiero volver a la policía. Di mi vida allí y así me pagan», remató.